Senda Mitológica del Monte Tejas, el museo al aire libre más bonito de Cantabria
Si eres de los que disfruta caminando por el bosque mientras descubres criaturas de leyenda, la Senda Mitológica del Monte Tejas es para ti. ¿Te imaginas pasear entre anjanas, ojáncanos y musgosus mientras respiras aire puro? Pues eso es exactamente lo que ofrece esta joya en Cantabria. Es, sin exagerar, el mejor museo al aire libre para conocer los seres legendarios de la mitología de Cantabria. Y lo mejor: es ideal para toda la familia, los niños van a disfrutar un motón.
En este museo al aire libre, la mitología cántabra, con su mezcla de misterio y tradición, cobra vida entre los árboles, transportándote a un mundo donde lo mágico parece real. Cada paso es una lección viva sobre un folklore que, gracias a iniciativas como esta, sigue muy presente.
Estas figuras, obra de Terio Lombilla, son verdaderas obras de arte. Desde 2021, este escultor ha dado forma a algunos de los personajes más icónicos de la mitología cántabra: el ojáncanu, la anjana, el musgosu, el arquetu… Cada figura tiene su cartel explicativo, y muchas están esculpidas directamente en troncos caídos, en un ejercicio de arte sostenible.
Es una ruta fácil, sin grandes desniveles, perfecta para niños y personas de todas las edades. El camino está bien marcado, con esculturas de madera que aparecen cada pocos metros. Los niños alucinan, cada escultura es una sorpresa, una oportunidad de aprender y dejar volar la imaginación. Para los adultos, es una ocasión perfecta para reconectar con las raíces cántabras, con esa tradición oral que forma parte del alma de Cantabria. Hay algo profundamente emotivo en ver cómo generaciones distintas se emocionan con las mismas historias.
Otra parte que me encantó fue el contraste entre lo salvaje del bosque y el detalle meticuloso de las figuras. Es como si la naturaleza y el arte hubieran pactado para contar juntas las leyendas del norte. Y eso, sinceramente, no lo encuentras en cualquier sitio. Toda esta experiencia, única y envolvente, merece estar destacada desde el principio como parte esencial de lo que hace mágica esta ruta.
Ubicación – Cómo llegar
La senda se encuentra en Tarriba, un pequeño pueblo del municipio de San Felices de Buelna. Para llegar, solo tienes que dirigirte hasta el aparcamiento del refugio del Monte Tejas, donde comienza el recorrido. Desde Torrelavega, estás a menos de 20 minutos en coche. Hay señales claras que te indican el inicio del sendero, y puedes aparcar sin problema en las inmediaciones.
Una vez allí, verás un cartel de bienvenida y un camino de tierra que se abre paso entre robles, encinas y castaños. La sensación de estar entrando en un espacio encantado es real desde el primer minuto. El entorno es muy accesible, ideal para una excursión de medio día, incluso con niños pequeños o personas mayores.
Además, el acceso es gratuito, lo cual lo convierte en una excelente opción para planes familiares sin que el bolsillo sufra.
Mejor época para hacer la Senda Mitológica del Monte Tejas
Aunque se puede recorrer en cualquier época del año, mi recomendación es ir en primavera u otoño. En primavera, los colores son vivos, el bosque está lleno de vida y la temperatura es perfecta para caminar. En otoño, el follaje crea un ambiente mágico que parece salido de una historia de anjanas y trasgus.
Evita los días de lluvia si no quieres lidiar con barro y caminos resbaladizos. Un buen calzado de senderismo es imprescindible. En verano también es una opción válida, pero lleva agua y protección solar, especialmente si haces la ruta extendida.
Los fines de semana pueden estar algo más concurridos, por lo que si buscas tranquilidad y quieres disfrutar del bosque en silencio, intenta ir entre semana. Personalmente, fui un jueves por la mañana y prácticamente tuve la ruta para mí solo, lo cual amplificó esa sensación de magia y conexión con la naturaleza.
Personajes mitológicos de Cantabria
De entre todos los seres que habitan los bosques y montañas de Cantabria, emergen figuras tan antiguas como las raíces de sus robles, envueltas en leyendas que aún susurran entre las hojas.
El Ojáncano, coloso de un solo ojo y corazón oscuro, mora en remotas cavernas de la alta montaña. Representa el mal más puro y temido, y es, sin duda, el personaje más emblemático de la mitología cántabra.
Los Trentis, pequeños duendes del bosque, se camuflan entre la maleza con túnicas de hojas, musgo y raíces. Son traviesos y escurridizos, difíciles de ver, pero imposibles de olvidar cuando juegan con quienes osan perderse por sus dominios.
Las Anjanas caminan en silencio entre los árboles, delicadas y luminosas. Son hadas benévolas, guardianas del equilibrio natural y protectoras de todo lo vivo. Su dulzura las ha convertido en las más amadas entre los seres mitológicos del norte.
Los Caballucos del Diablo surgen con la caída del sol en la noche de San Juan. Son siete jinetes alados que cabalgan el cielo y cruzan los bosques con furia, trayendo consigo travesuras oscuras y el eco de antiguas maldiciones.
El Musgoso reina en lo profundo del bosque. Con su cuerpo cubierto de líquenes y su alma ligada a la tierra, se presenta como el espíritu protector de la naturaleza. Su flauta de madera emite melodías que alertan sobre peligros invisibles, como si la propia selva hablara a través de él.
Os recomiendo escuchar esta audioguía con los personajes de la mitología cántabra.
Descripción de la ruta
La ruta sorprende por su sencillez, la calidad de las esculturas en madera y su carácter evocador. El recorrido es de unos 2 km (ida y vuelta) desde el último aparcamiento habilitado, aunque hay variantes más largas en función del lugar donde se deje el coche. Es un sendero sencillo, sin desniveles importantes, ideal para familias y personas de cualquier edad. El camino está bien señalizado, con figuras de madera repartidas a lo largo del trayecto.
Cada una cuenta con su cartel explicativo, y muchas están talladas directamente sobre troncos caídos, lo que convierte el paseo en un ejercicio de arte y sostenibilidad.
A lo largo del recorrido, el entorno natural cambia constantemente. Se atraviesan zonas umbrías llenas de helechos y claros donde la luz se filtra entre las ramas. Todo invita a una experiencia inmersiva en la naturaleza, como si el bosque narrara las historias que inspiran las esculturas.
Hay bancos y rincones para descansar, e incluso un área habilitada para merendar. Yo mismo me senté frente a una de las figuras mientras comía algo, pensando: «Esto va más allá de una ruta de senderismo, es un museo al aire libre dedicado a la mitología cántabra».
Los niños disfrutan descubriendo cada escultura como si fuera un tesoro escondido, y los adultos pueden reconectar con las raíces culturales a través de estas leyendas. Ver cómo distintas generaciones comparten la misma emoción resulta especialmente conmovedor.
También destaca el contraste entre el carácter salvaje del bosque y la precisión artística de las figuras. Es como si naturaleza y arte se unieran para contar juntas las leyendas del norte. Esta experiencia única y envolvente merece ser recordada como el alma de la ruta.
Recomendamos descargar la ruta desde Wikiloc: Track de la Senda Mitológica del Monte Tejas
Atractivos turísticos cercanos a la Senda Mitológica del Monte Tejas
- Cartes y Riocorvo, dos preciosos pueblos de Cantabria.
- Iglesia de San Jorge.
- Puente Viesgo y la Cueva de El Castillo.
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